El miércoles usamos por vez primera la nueva loción lubricante, y tal y como nos dijo el doctor, al continuar memín con su constante llegada hasta lo más profundo de mi ser, o bien era él o yo quién recordaba la necesidad de mantener la lubricación para facilitar el sexo con la suavidad que nos recomendó el doctor; me queda claro que la falta de lubricación fue la que nos llevó a hacernos daño en medio del frenesí sexual al que estábamos llegando.
Dani, el viernes pasado te pedí me aceptaras como novio - amante, y no sabes como aprecio y valoro tu aceptación, es por eso que quiero comentar contigo algunas cuestiones que para mi deben quedar muy claras, sobre todo después de leer las entradas de hoy en tu blog.
Quiero dejar clara mi situación para contigo; si te pedí una relación formal es porque te amo, wey, no lo hice solo para tener sexo contigo, se que solo con pedírtelo podría tener sexo contigo, tal como hoy, y se que podría seguir teniéndolo sin llegar a un mayor compromiso contigo, pero no es eso lo que quiero, en verdad te amo Dani, te quiero para mí, solo para mi Dani. Creo que esta plática la debimos tener desde el viernes o sábado pasado, y lamento no haber comprendido tu necesidad de sexo activo. La franqueza con la que estás manejando tu blog me hizo comprender, hace rato mientras leía tus últimas entradas, tu actitud franca y abierta para conmigo, la total comodidad y libertad que me ofreces en esta relación tal como la hemos llevado hasta hoy, y no sabes de que manera te lo aprecio, igual valoro tus necesidades sexuales que apenas comienzo a conocer a plenitud.
Por supuesto que yo estaba con las lágrimas en los ojos y un nudo en la garganta que me impedía hablar, y memín continuó.
Se que mi oferta implica el satisfacer tus más profundos deseos de sexo activo, Dani, enséñame a complacerte, llévame de la mano para emprender algo que no entiendo, déjame aprender contigo a ser tu amante receptivo, a hacerme tuyo, solo tuyo y de nadie más, como no lo he sido con nadie más. Dani, cógeme, déjame aprender a ofrecerte que te sácies en mi, y solo en mí, te repito, te quiero conmigo y para siempre, si lo deseas te invito a que vayamos al futuro sin mirar atrás, que busquemos a la mujer de la que hablamos.
Esto que te propongo no es nada fácil para mi, en casa ha sido un verdadero terremoto familiar en el que nacho me apoyó con especial énfasis, imagínate a mis padre con su hijo machín convertido en tu amante homosexual de un día para otro. En casa se te aprecia y respeta desde siempre, pero ahora mis padres no saben como reaccionar contigo, se esfuerzan por no tratarte mal, esa ha sido mi exigencia y demanda con ellos.
Discúlpame si te he ofendido, pero por favor ya no llores más, me dijo. Yo solo pude responder, es que no esperaba tanto amor, memín, y me aferré a él, busqué cobijo entre sus brazos, y que mi espalda y su pecho, su sexo y mis nalgas, y nuestras piernas, que nuestros cuerpos, toda nuestra piel tuvieran el mayor contacto posible.
Le dije: Es que tanto amor me sobrepasa, tu propuesta es algo inesperado para mí, va más allá de cualquier expectativa de relación contigo, o con alguien más, me sacaste totalmente de balance, memín. Claro que me gusta tu idea y quisiera decir que si, pero a la vez me aterra tu confianza en ver hacia el futuro, eso es algo que yo no tengo, y debo ser franco contigo, si con alguien me veía yo en el futuro era con nacho, jamás contigo, tu oiste a mi abuela hace poco. No quiero ofenderte o lastimarte, te pido que me dejes pensar en ello, mientras tanto, acepto iniciar tu pacto de fidelidad, solo contigo y con quién ambos de común acuerdo decidamos, pero también tomemos un margen de error, al menos yo lo necesito, una infidelidad necesaria con explicación, una segunda infidelidad, ésta sin explicación para salir de una situación que pudiera romper la relación; y finalmente una tercera infidelidad, como claro mensaje de ruptura.
Esa fue mi contra propuesta a memín y vino la pregunta:.
¿Va?, ¡Va!.
XD: XD q hg D mio?.