Ayer poco antes de las 8 de la noche llegó memín a casa, ya anda más alivianado por lo de su ex.
Se nos quedó viendo en silencio por un momento y solo hizo un comentario, nos dijo: huelen a sexo, cabrones. Y del rico, le respondí, mientras, seguí trabajando en la compu, para terminar de preparar algunas entradas para el blog. Memín puso la tele para ver alguna tontería, en tanto Nacho se acercó a ayudarme y estuvimos tupido y parejo hasta las 4 de la mañana en que me dijo hazme el amor.
Cerca de las 8 de la mañana, nos despertamos asustados entre el total desmadre, mi abuela que viene de su pueblo pocas veces a casa, de repente entró a mi cuarto, y al vernos acostados nos destapó y la gran escena.
La locura.
Su nieto menor durmiendo con dos cabrones, los tres encuerados, empiernados, todos con tremendas erecciones mañaneras y para rematar, Dani el nieto impoluto, con la mano en la pingas paradas de Nacho y memín acariciándolas inmerso en sus sueños más profundos.
Sí, fue una escena de total locura, mi abuela y mi madre frente a tres chavos encuerados y con tremendas erecciones, que obvio acabaron en tres segundos. fiiiuuuuuuhhhhh. En solo tres segundos acaba la grandeza del pito erecto. En medio de aquella acción se me ocurre decirle a la abuela que no se espante, pues solo tiene un nieto puto, y chale carnal, que me cruza tremenda bofetada y peor sermón y regaño, hehe. Y obvio, más acción en el cuarto, pues escuchan el borlote mi hermano y mi padre y que se apuntan al espectáculo nudista. Mientras, Nacho, memín y yo, en pelotas frente al mundo enseñando tus peores vergüenzas, pues aquello se te arruga todititito y se hace nada. Total que hasta un helicóptero les hice.
Lo bueno fue que nadie me vio el culo todo rosado por el truene que me recetó memín al anochecer de ayer.
Que oso..... pero ya escribiré varias entradas para extenderme sobre todo esto... pues ahora comprendo el porqué y el cómo suceden las cosas en casa.
Total que ya no salimos de casa, y aquí estamos pues decidimos seguir avanzando en el blog. Si es que se puede.
Y para variar, los acontecimientos me rebasan siempre, y narrar los sucesos de anoche y el medio día de hoy me va a llevar al menos tres o cuatro entradas en el blog.
Empecemos.