pero memín me conoce casi a la perfección, y apenas empecé a paladear cada rincón de su piel que iba quedando desnuda, el muy cabrón se abrió la bragueta y saco su miembro ya erecto a más no poder, lo que me obligó a desnudarme por completo y yo mismo cobijarlo de inmediato insertándolo muy dentro de mi, para poder seguir así, ensartado, con mi ritual de irle despojando poco a poco de su ropa. y cuando finalmente le había desnudado, no me dejó concluir, sino que me masturbó hasta hacerme eyacular en su cara y pecho, y lo embarró en su cara, pecho y brazos, diciéndome, quiero oler a ti, para que sepas que tu y yo somos uno, solo uno.
Porqué si algo se, es que me amas, muy a tu manera, pero hoy aquí estás, conmigo, como siempre.
y por primera vez tuve un orgasmo anal mientras mis lágrimas escurrían por mis mejillas, llorando por el amor que envolvía las palabras de memín. y por tercera vez en esa madrugada memín me llenó con sus palabras y sus fluidos vitales sin retirar su miembro de mi interior. y me dijo: sé que lloras por amor, por nuestro amor, sigue llorando dani, que a silvia y a mi , a ambos nos hace mucha falta tu presencia.
.