No se cuanto tiempo pasó, memo me tenía abrazado con fuerza, mientras brotaba incontrolable toda la tensión emocional que yo había acumulado a lo largo del día; fueron sus suaves besos acariciando mi cuello los que poco a poco me tranquilizaron, hasta que gire para posar mi cara en su pecho y me aferré a su torso; y seguí llorando por un buen rato.
Fue hasta que me calmé, que memo me dijo:
¿Sabes que eres el ser más claro y transparente que conozco? y por eso te amo tanto. Apenas salimos por la mañana le dije a hector que ibas a empezar a acelerarte por la buena acción que habías hecho sin pensarlo, igual le comenté a silvia lo que había pasado, y estuvo de acuerdo conmigo; pero aún te aguantaste y no soltaste ni un reproche, ni una sola duda. No quisiste echarnos a perder a silvia y a mi la cita de esta noche.
Pero no podías aguantar ya más tiempo el acelere que traías.
Mientras esperábamos a que llegara el hermano de hector en su carro para llevarlo a su casa, le comenté que lo sucedido era típico de tí, sin pensarlo viste la oportunidad de arreglar un pedo mío y no dudaste, no pensaste más allá, actuaste, le dije a hector como ahora te lo digo, que por eso me traes loco por tí. Simplemente no tienes capacidad de soportar la injusticia o la mala fe, aún cuando estás escribiendo, pones una frase y ya tienes la variante, por lo general jocosa o contrastante.
No puedes competir con hector, a él lo quiero desde hace muchos años, es mi mejor amigo, y todo lo que le pasa me importa y me duele. A ti te amo. Y así como te lo digo ahora, igual se lo dije en la mañana a hector. A Dani los amo intensamente, con pasión y con locura. A Hector lo quiero más que a mi carnal, Hector es mi hermano por elección, y me duele pensar que eso pueda cambiar, pero esa es la decisión de Hector y la debo respetar.
Dani, tu jamás podrás competir con Hector, no hay punto de referencia entre ambos.
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