y yo bailando -we like boys in cars-, silvia se levantó a bailar conmigo y con la mirada me señaló la puerta, así que por fin giré y vi a hector petrificado y a memo con tremenda sonrisa en la cara, por lo que le hice una seña a hector de que cerrara la puerta y que pusiera el botón del candado, y a memo de que se quitara la ropa y se pusiera a bailar con nosotros, mientras le daba un beso de bienvenido y silvia hizo otro tanto.
después, memo se acercó a hector y empezó el ritual de la danza de quitarle poco a poco la ropa, y comenzó por los tenis, mientras nosotros bailábamos a su alrededor, y después memo siguió con la sudadera y cada prenda de su ropa, hasta finalmente quitarle las calcetas, y cuando el chavo estuvo desnudo y con tremenda erección, simplemente bajó la mirada todo apenado, yo me acerqué a él y le levanté la cara tomándolo por la barbilla, y le di un suave beso, siempre bailando y rozando con mis gluteos su pene erecto, para después hacer lo mismo con mi pene entre sus nalgas.
y antes de que memo empezara a quitarse la ropa, silvia lo tomó de la mano y le hizo que pusiera un banco en el centro del cuarto y lo ayudó a subir al banco; y empezó el espectáculo de memo desnudándose y nosotros tres danzando -boys boys boys- a su alrededor. y las ropas de los cuatro, -we love them-, en un solo montón junto a la cama, tal como acostumbramos.
y memo se bajó del banco y nos pusimos a bailar los cuatro, -i like you a lot lot-, en un intercambio coordinado de parejas y un coqueteo desprovisto de toda consideración carnal, más altamente sexual, think you're really hot hot-, todos en un verdadero paroxismo en el que desatamos y dejamos salir nuestras más profundas pasiones, y bailamos y bailamos por cerca de media hora más, -when we dance real crazy- hasta que el tiempo marcó la hora de que memo debía llevar a silvia a su casa.
así que mientras memo y silvia se vestían, hector y yo nos metimos al baño para darle el último masaje completo, con agua caliente, pero memo y silvia no resistieron la tentación de darse un baño con nosotros. yo ayudé a silvia a ponerse su gorro de baño, mientras memo se hincó frente a ella, y besándole los genitales, le dijo, amor hueles a dani, antes de darle un beso entre sus labios y el clítoris. pero el tiempo ya estaba en contra así, que ambos se enjabonaron con rapidez y nos dejaron a hector y a mi en el baño.
cuando memo y silvia salieron del cuarto, hector solo alcanzó a exclamar un: ¡no mames!, que chido wey, super, son uuuuff.