En la fiesta de fin de año estabas acompañado de una muchacha muy linda, tu novia, ¿ya terminaron, ya no entiendo eso de tu homosexualidad?; me preguntó el director de administración, a lo que solo respondí: Es que soy bisexual, tengo novio y él también es novio de mi chica, ambos son mi pareja.
¡Ufff!, fue la exclamación del Dr, pero como ya estaba metido en el ajo, y hasta el cuello, pues me seguí de frente comentando: por lo mismo no quise dejar pasar más tiempo y pedí hablar con usted para advertirle y decirle que estoy a lo que usted disponga.
¡No, Daniel!, por tu situación personal no hay problema, mi expresión es por la impresión personal de ver en donde estás metido, y perdón por el comentario, pero en verdad me has sorprendido, jamás pensé que pedías hablar conmigo para algo como ésto, lo obvio era el cheque de incentivos, o algo laboral, pero una relación personal bisexual, doble, vaya que me has sorprendido.
y yo enmudecí, me quedé callado y sin saber que decir o hacer, pensando que en cualquier momento el piso en verdad se iba a abrir y yo iba a caer tres pisos hasta la planta baja. y mi sensación debe haber sido tan clara que el director me dijo: ¡calma muchacho!, todo está bien, pero en verdad me has sorprendido, y ahora creo entender lo especial que hay en tu forma de ser; no te sientes mal contigo mismo, pero sí te preocupa en lo que puedas comprometerme, la respuesta es:
Para nada, Daniel, no te preocupes por el aspecto laboral o institucional. Pero si preocúpate por las reacciones que tu forma de vida puede provocar en la gente, es probable que eso te cause problemas y también a tus parejas. yo le conteste: de hecho mi chica ya tiene problemas en su casa por la relación, sus padres no están muy de acuerdo conmigo pues ya conocen de mi homosexualidad, y apenas toleran a memo que ha sido su novio por más de dos años.
Pero para mi es maravilloso, estoy enamorado, es algo único, nunca imaginé sentirme tan bien, Doctor
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